sábado, 3 de marzo de 2012

Donde hubo fuego siempre quedarán cenizas...

Parecía que tenía los argumentos necesarios para convertir el día de ayer en uno de esos días en los que te encierras en ti mismo y en tus problemas personales. Pero la tragedia dio lugar a la reflexión.


Todos tenemos problemas, nunca he conocido a nadie que no los tenga. Pero la magnitud de cada problema la elige su dueño. Cuenta la leyenda que si cada uno de nosotros escribiéramos en un mismo cuaderno nuestros problemas, para más tarde leer los de todos y luego elegir con cuales queremos quedarnos, prácticamente todos elegiríamos quedarnos con los nuestros. Tú eliges que valor le quieres dar a cada problema. Así que no le des demasiada importancia a tu problema, pero si puedes hacer algo para solucionarlo, hazlo. Y si no puedes, pasa la página, la vida continúa.

2 comentarios:

  1. Con un poco de viento esas cenizas se esparcen

    Y sí, aunque sean problemillas, nada que no vaya a solucionarse, no? Piensa en la de cosas que podremos contar y recordar de aquí a un tiempo...

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    1. Sí, pero a veces si esas cenizas se alimentan pueden volver a arder...
      Pero en fin, yo soy la que siempre da una visión optimista de esto, así que esperemos que esas cenizas se las lleve viento, que nadie sabe donde habita...

      "Dentro de un tiempo nos reiremos de todo esto" jajaja

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